Los 5 mejores pretextos para no progresar en la vida.
1. No tengo tiempo para esas cosas.
Cuántas veces nos hemos puesto a pensar en querer hacer nuestro propio negocio, ganar un dinero extra como freelance, tomar algún curso, practicar algún deporte o actividad física. Y nuestro pretexto siempre es el tiempo, nos gusta justificarnos con el trabajo, esta semana no puedo porque es cierre de mes, estamos atrasados en la producción, se juntó el trabajo de 3 semanas.
En generar el problema es debido a la falta de compromiso, por salir un poco de nuestro confort y porque no encontramos la suficiente motivación para hacerlo.
- Haz una lista de todos los beneficios que vas a obtener al hacer esa actividad.
- Busca retarte a ti mismo.
- Si de verdad quieres hacerlo haz un compromiso con alguna persona implicada en la actividad, por ejemplo: si vas a hacer freelance comprométete con el cliente a entregar el trabajo en tiempo y forma.
- Inicia con cosas fáciles de alcanzar. Por ejemplo a mi no me gusta barrer y trapear, un dia me propuse solo barrer y trapear la sala, pero ya que inicié me seguí con el comedor y la cocina.
2. No necesito aprender nuevas cosas.
Aqui tenemos siempre a dos tipos de personas:
Los sabelotodo.
¡Tu que me vas a venir a contar a mi, yo lo he visto y vivido todo!. Esta es la principal frase de estas personas que como ya tienen su taza llena, creen que ya no existe nada nuevo.
Sin embargo esto solo es una ilusión que se nos hace con la experiencia. La realidad es que la información y el conocimiento cambia día a día, de manera constante y algunas veces acelerada. Por ejemplo en su momento un perforador de tarjetas era visto como un ingeniero de la NASA, hoy en día solo es parte de la historia, así que todos los días hay conocimiento e información nueva.
Los que ya no están para esos trotes.
Lo identifico con mi padre, él no quería aprender a usar la computadora porque decía: “ya estoy viejo para aprender a usarla” y como él hay muchos. Pero es un hecho que nunca es tarde para aprender o hacer cosas nuevas.
La información y el conocimiento está en continuo cambio, debemos ser conscientes de ello si no el tiempo se encargará de hacérnoslo ver.
3. Las personas y el destino conspiran contra mí.
Otro de los pretextos que nos tienen atados es ser las víctimas de todo, del destino, de la mala suerte, de las personas que impiden que yo crezca. Pero en realidad soy creyente del libre albedrío y que mi vida gira en función de mis actos y decisiones, no de mis circunstancias.
Así que, si nací pobre es mi responsabilidad superarme, no es culpa de mis padres.
Si mis padres se separaron, es mi responsabilidad salir adelante, no de la acción de mis padres.
Si me hicieron un fraude, es mi responsabilidad aprender de ese error y volver a intentar.
Si tuve hijos, es mi responsabilidad hacerme cargo de ellos y no hacerlos mi cárcel o mi justificante para no hacer lo que me apasiona.
La vida es como una lancha de motor, si tenemos claro nuestro destino y tenemos nuestro motor con combustible, puede haber tempestades que nos desvíen pero nuevamente retomamos el curso hasta alcanzar dicho destino.
Si no tenemos claro nuestro destino y nuestro motor no tiene combustible, simplemente iremos a donde la marea o tempestad nos lleve.
En nuestra cultura mexicana como en otros países, existen muchos relatos e historias referentes a la mala y buena suerte, que si tiras la sal, que si rompes un espejo, la tierra de panteón?. En fin, muchos creemos que esto es verdad y otros que es mentira, pero como dice Henry Ford en ambos casos tenemos razón. Porque si solo pensamos que tendremos mala suerte eso pasará y viceversa.
4. Estoy esperando a que sea el momento indicado.
Este es uno de los pretextos clásicos de las personas que andan siempre queriendo justificarse para procrastinar o aparentando ser precavidos y conservadores.
El postergar las acciones que queremos hacer, nos lleva al fracaso y lo se porque lo he vivido unos de mis grandes males es este y dado mi flojera he perdido muchas oportunidades a lo largo de mi vida, proyectos, ideas, todas se fueron al caño por dejar pasar el momento.
Otro consejo que puedo ofrecer, es que si vas a emprender en algo, no esperes mucho tiempo, queremos salir cuando las condiciones como la economía, el mercado, el tipo de cambio, el sexenio, etc. Sean las más ideales para nuestro proyecto, pero lo que es un hecho es que nunca llegará ese momento y si llegara a darse será demasiado tarde para poder obtener los resultados esperados. Tampoco estoy diciendo que nos aventemos como “el borras”, claro que debe haber una planeación y dirección de las cosas, pero lo que no debes hacer es tardar mucho. Ya que cuando salgas otro podría haberte ganado la idea o peor aún el mercado.
5. No tengo dinero para hacer eso.
Para muchos esto podría no ser un pretexto sino una realidad, pero para mi esta es la mayor de las causas por las que muchos no hemos podido dar el siguiente paso en nuestras vidas.
Cuando decimos que queremos emprender, la primer barrera es el dinero, se necesita para rentar, para comprar equipo, insumos, para pagar empleados, pagar servicios etc.
El problema es que nos enfocamos en lo que no tenemos y no en lo que podemos hacer con lo que sí tenemos.
A caso crees que Steve Jobs tenía mucho dinero para pagar una nómina y materiales para producción? El se enfocó en lo que tenía “su idea, su tiempo y sus amigos”, nada más.
Después de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, ¿crees que japón tenía dinero o los grandes recursos naturales para levantarse?
Muchos negocios comienzan con una idea muy simple y cuando se cree en esa idea los recursos para lograr despegar se vuelven secundarios, puedes usar viejos equipos, trabajar en cualquier lugar en donde puedan estar sin que les cueste, el cuarto de tiliches, el departamento del amigo, la accesoria de la tía. Pedir préstamo a sus familiares, romper el cochinito, invitar a inversionistas, registrar tu proyecto en fondeo comunitario, utilizar redes sociales gratuitas para promoverte, trabajar con tus amigos que creen en el proyecto, en fin cuando te centras en las soluciones y no en las limitaciones todo estará a tu favor.
Entonces, ¿cuál es tu pretexto?